Primera etapa de la Ruta que enlazaba las localidades de Jacó y Santa Ana, localidad cercana a la capital, San Jose. En el Roadbook marcaban 108 km pero para variar en el caos que se respira a nivel organizativo, los kilómetros realizados han sido cerca de 115.
Después del madrugón y el desayuno a las 3 de la mañana, a las 6h nos poníamos en marcha. Salida a buen ritmo y de golpe y porrazo un Marie Blanque sobre tierra. Sufro como un perro, a las rampas le sumamos el calor y la humedad que ya hacía a esas horas y el cóctel es explosivo. El protector solar y el repelente me imagino que desaparecen a principios de subida porque sudo como nunca lo había hecho. Al principio aguanto entre los 20 primeros pero veo que ni es mi ritmo ni me conviene así que relajo un poco que queda mucho.En el km 20 llega la entrada al infireno:
Me lo habían contando pero si os soy sincero no me lo creía, pensaba que era una perogrullada pero no, aquello no desmerece en nada a lo que habrá en ese sitio pero aquí en vez de fuego había barro a patadas, agua a mansalva y mucho, mucho peligro, ni una sola persona de la organización durante los 10 km y es que simplemente allí no se puede entrar, una fatal caída y ni me imagino como pueden sacarte de allí. En apariencia 10 km parecen pocos pero la cuestión es que el 98% de los mismos los tienes que hacer andando pero sobretodo con la bici a cuestas. Es un continuo bajar, atraversar un río y subir repechos imposibles donde en muchos de ellos tienes que llevar la bici a cuestas incluso escalando en alguna de las imposibles rampas,todo ello aderezado con barro y cuando no pedruscos mojados donde hay que tener mucho cuidado de no romperte la crisma, el sumum es la mezcla de subida con pedruscos y bici a cuestas, aquí las manos las tienes acupadas con la bici así que hay que confiar en el equilibrio. A todo esto decir que estamos en plena selva, que todo esto está adornado de ramas y raíces y que se mantienen las condiciones de calor y humedad.
Aquí como es lógico, no para de pasarme gente, una vez afuera empiezo a recuperar. Llega el siguiente escollo, un puerto de montaña sobre asfalto de 18 km de longitud con rampas del 12% dignas de un puertazo de los Pirineos. Este se me da bien y empiezo a recuperar posiciones aunque procuro regular ya que seguido a esto llegan caminos que si bien están en buen estado, son un continuo sube y baja para rematar con otra subida de 8 km y más adelante un repechón de 2 km para rematar las pocas fuerzas que quedan.
Finalmente consigo entrar el 47 de la general y el 20 de mi categoría, todo ello en 8h 42 min, 156 ppm de medía, 4145 m de desnivel acumulado positivo y 7800 kcal.Estoy contento por ser capaz de terminarla pero ahora toca recuperar el cuerpo para la segunda y estudiar el recorrido.
El primero?, mirar en la web de la organización que me da igual, la verdad.
Publicado por Iñigo Labat Yanguas desde Costa Rica.
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